Tal y como dice el dicho 'si no puedes con el enemigo pues únete' y eso fue precisamente lo que hizo la familia Cruz-Cox del Condado Pinellas. Tatiana ya se encuentra en la recta final de su embarazo y espera con ansias la llegada de su segunda hija a quien llamará Amaya. Su fiesta de baby shower tuvo que ser cancelada ya que habría sido en el mes de marzo cuando toda la situación de la pandemia acaparó las vidas de todos en Tampa Bay, pero sabía que no quería dejar pasar una sesion de fotos.
"Ordené un vestido de maternidad justo en el mismo momento en que todo esto explotó y la empresa en donde lo conseguí me canceló la orden, entonces me quedé sin vestido. Al no tener un vestido bonito para la sesion de fotos pensé bueno algo gracioso será entonces", nos explicó.
La familia utilizó un disfraz que tenian de los Ghostbuster y hasta le cambiaron la insignia por una imagen del coronavirus, en sus manos los artículos esenciales en este momento para desinfectar de las marcas Lysol y Clorox. La hija mayor de la pareja también participó como integrante del grupo caza coronavirus.
Cabe destacar que Mario, Tatiana y Analisse también hicieron otras fotos con vestidos formales frente delTampa Theater y la marina de Tampa como parte de la historia del embarazo. Tatiana señala que el segundo vestido que utilizó de color negro y rosado ya lo tenía en su closet y que la parte de atrás estaba abierto en todo momento, pues apenas le servía. "Nuestro fotógrafo Lo de Lo Vazquez Photography hizo magia", afirma.
Pese a la pandemia, la orden de quedarse en casa y las recomendaciones de los CDC el fotógrafo profesional Lo Vazquez ha seguido trabajando. "Hemos tenido menos sesiones de fotos pero no hemos dejado de trabajar. Para nuestra salud y la de los clientes ya no hacemos maquillaje ni el arreglo de cabello sino que seguimos el distanciamiento físico y también usamos mascarillas", explica el fotógrafo.
Foto: Suministrada por Lo Vazquez Photography